lunes, 27 de noviembre de 2017

[HowTo] Insonorizando un AKS74U. Usos de la cámara de una bicicleta.

La primera frase de esta entrada puede hacer pensar que lo que se pretende es meterle un silenciador, tan incómodo como inútil, a nuestro pequeño kalasnikov.

Nada más lejos de mi intención.
Consciente del molesto y delator tintineo de la anilla de sujección de la correa, me propongo a darle una solución lonchafinista y de fortuna que no sea la socorrida y pegajosa cinta aislante y que permita darle un segundo uso llegado el momento.



He visto gente que -creo que emulando a los rusos "de verdad" XD- colocan en las culatas una especie de torniquete militar, una especie de correa rosa enrollada. A mí no me van esos colores, ni gastar dinero.


1. Cortar un trozo de 4 cm. aprox.

2. Estirarlo con ambas manos y meterlo por el "lado ancho" de la culata, o bien desmontar la culata. He preferido hacer lo primero por vagancia.



3. Bajar la goma hacia la bisagra de la culata.

4. "Tapar la anilla" y plegar la goma.



El pliegue de la goma bien pudiera servir para ocultar una pastilla potabilizadora o una aspirina.

¿Y dónde tener a mano un trozo de goma extra? En el pistolete, ¿no? Aún no sé si mejora el agarre, pero lonchafinista queda un rato. Me gusta.

Si se desea amortiguar el ruido de los culatazos, basta repetir el procedimiento dejando la goma en el paso nº 1, justo donde apoya nuestro hombro.

[HowTo] Protegiendo cosas con la goma de una cámara de bicicleta

Hace un tiempo mencioné los usos que la goma de una cámara de una bicicleta puede tener más allá del cometido para el que fue diseñada y adquirida.
Cuando se sufre un pinchazo, ¿por qué tirar la cámara? Mejor repararla. Uno se siente mejor reparando sus propias cosas. El ritual de reparar pinchazos, como el talar leña, es una actividad que se disfruta, que le mueve a uno en un estado de instrospección muy sensato.
Y cuando ya esté tan pinchada que no merezca la pena arriesgarse a colocarla de nuevo en la llanta... ¿por qué no darle un nuevo uso?.




Una de las aplicaciones de la goma de la cámara de una bicicleta es proteger cosas, prevenir roturas.

Este es un pequeño bote de penicilina, ya vacío de esa substancia, en el que guardo café soluble mezclado con azúcar. Es muy útil cuando me echo al monte. Es de cristal y, por tanto, susceptible de quebrarse.




Cortando un pedazo de cámara de bicicleta evitaremos que el recipiente sea tan frágil.

Se comienza por la embocadura.




Esto es como un parto, pero a la inversa.




Y, tirando de la goma y empujando el botellín, trabajo terminado.




Listo para desenroscar y servir



[HowTo] Usos de una cámara de bicicleta. Hazlo tú mismo.

1, 2 y 3! Atención! Alarma! barbies comprando -es decir, cómo no, gastando dineros- GOMAS DE POLLO "ESPECIALES" porque se las vieron a un nancysil en una foto XD

En los primeros capítulos del asilvestramiento lonchafinista se mencionan la de cosas que se pueden hacer con una CÁMARA de bicicleta o moto pinchada o rajada (y también con un neumático). Pesa muy poco para lo útil que es.
No hay que ceñirse únicamente a la experiencia ajena, el ser humano también tiene imaginación.





Sujetar cosas
Proteger cosas

Insonorizar cosas
Asegurar sujecciones
Guardar muchas cosas al cinto o en bandolera o donde te plazca
Correa de fortuna para un fusil
Compartimento estanco
Pescar
Trampas
Torniquete
Tirachinas (si la goma es buena y está en buen estado)
Silla
Herramienta para asfixiar / ahorcar
manguera, sistema de filtrado, conducción de fluidos
junta de goma de emergencia
etcétera, etcétera...

martes, 7 de noviembre de 2017

Centauro 17.2 Compañía Charlie, poderosa como el trueno

Regresado ya de la campaña de Centauro, con las piernas como un canguro, el frío metido en los huesos, el cuerpo dolorido y magullado, y marcas en hombros y otras partes, mas la honra intacta y el espíritu embriagado, con esa extraña sensación que acontece cuando uno -tras largas jornadas- deja de llevar el macuto y el rifle a cuestas (que pareciera que ya forman parte del mismo cuerpo), va siendo hora de recapitular lo que esta campaña fue, los hechos que en ella acontecieron.


Con la satisfacción del deber cumplido y tras dedicar unas cuantas horas a reparar las averías de este organismo mío, puedo concluir que -una vez más- el Centauro no ha defraudado a aquellos que gustamos del masoqueo y las emociones fuertes en un contexto de Simulación Militar puro y duro, sin gilipolleces ni distracciones.
Es, como muchos saben, de ese tipo de operaciones en el que los "fregaos" a tiro limpio hay que ganárselos primero a base de masoqueo, fortaleza de cuerpo y espíritu, y conocimiento (más que chismes y artilugios), como fiel infantería; donde no basta con vencer al enemigo -que sufre, respira y camina igual que tú, pues (como decía Hartmann) aquí todos somos igual de insignificantes- sino también a los elementos que, como muchos sabrán, en esta región de España llamada Maestrazgo -tierra de templarios y tumba de ejércitos- son implacables y acostumbran a desatarse con una furia y un ímpetu que sacuden el alma.
Y de eso Centauro, como viene siendo desde que la bestia se engendró allá por febrero del 2014, anda sobrado. En este pequeño infierno en vida podía uno servirse de todo eso hasta empacharse si así se deseaba.
Y así lo hemos hecho, ¡vaya si lo hicimos!



Desperta Ferro fue asignado a la unidad Charlie Rebelde (o Romeo, si queremos ser pedantes XD), junto a las escuadras G.I.A.P, Black Bulls, HeadShot y Vélites, que a muchos les sonarán pues todo el mundo sabe de qué están hechos esos marines. Con los dos primeros había jugado operaciones a favor y en contra, mas con los dos últimos sólo en contra. Ahora puedo decir que he probado ambas facetas de los cuatro. Fue un honor y un placer, pues ahí en el barro es donde se ve de qué está hecha una escuadra.
Mi rendimiento dependía intrínsecamente del rendimiento de los que en aquellos momentos y en aquel contexto eran mis hermanos de armas. Si no fuera por el frío, el viento y la llovizna que sobre nosotros implacable caía, podría decir que me sentí como en casa. Estoy contento y orgulloso de lo que ha sido esta unidad Charlie R, PODEROSA COMO EL TRUENO, dura como el acero Krupp.
Esta vez el asunto empezó de noche. Una noche lluviosa, fría y ventosa, como son las de noviembre en esos lares. Gracias a Dios había luna llena.
Oscuridad, barro, caminos de cabras, alguna pendiente de vértigo, cursos de agua, resbalones a la carrera, castañeteo de dientes, !qué os voy a contar XD! Las inclemencias meteorológicas nos acompañaron durante todo el tiempo. Pareciera que Eladio y C.O.A.S. -como en otras ocasiones- hubieran sobornado al mismisimo Dios para que nos fustigara con los elementos.
Hube de hacer, como en tantas ocasiones, vida de "sintecho", con mi socorrida bolsa de plástico y mi funda de guitarra. Nada hay para un español imposible con cinco dedos en cada mano, un trozo de plástico y una cuerda.
En esta ocasión Alto Mando, experto en tentar a los espíritus más fuertes con la semilla de la desmoralización empujándolos a sucumbir, decidió que la primera misión NO iba a desembocar en unas coordenadas lejanas donde establecer un puesto avanzado, una especie de hogar para el sufrido infante.
Lejos de eso, Alto Mando secuestró a los líderes de cada equipo (y se los llevó a combatir lejos), y a las unidades -descabezadas de mandos- se les fue asignando misiones -una tras otra- que ejecutar, por supuesto con todo el equipo a cuestas. ¡Hay que ir ligeros!
Y así hasta que el día ya clareaba, momento en el cual -inesperadamente- se asignó la tan ansiada misión de búsqueda y establecimiento del deseado vivac y trinchera. Estando el Sol bien visible llegaban las unidades a las coordenadas uteme-edcincuenta asignadas.
Los mandos de las escuadras que conformaban las unidades ya se habían también reunido con nosotros en aquel lugar húmedo y ventoso en el margen del río Bordón, que discurre encajonado.
Había que fortificarse rápidamente para salir otra vez de misión. Búsqueda y Destrucción, plomo hirviendo y rechinar de dientes, y demás sabores, música para nuestros oídos.
Puedo señalar sin faltar a la verdad que en la compañía Charlie R. aquellos líderes de escuadra se encontraron con una UNIDAD ya cohesionada que ya trabajaba como un todo ejecutando los trabajos de vanguardia, reconocimiento, retaguardia, control de sectores, etcétera de forma mecánica y bien coordinada, como una máquina bien engrasada, MINISTROS DE LA MUERTE, tal y como pudieron comprobar apenas se produjo el siguiente choque.
Aquella mañana de sábado la sentíamos como si fuera de domingo y estuviéramos ya a punto de terminar y reunirnos con nuestros camaradas del bando contrario en la deseada comilona de hermandad. Mas no, en esos momento en que uno se pregunta "qué hago yo aquí", todos sabíamos que aún nos quedaban 24 horas más de masoqueo y de trabajo a conciencia, que a eso habíamos venído.
La operación fue discurriendo de forma brutal e implacable. Emboscadas, contraemboscadas, largas marchas, tomar y defender una posición elevada, extraer artillería o víveres, etc, etc... se fueron sucediendo. Llegó la segunda noche y con ella la segunda amanecida, que casi fue venida del Espíritu Santo. No hubo tiempo para la monotonía o la apatía. No hay cansancio cuando te espera la gloria.
El atrezzo, muy trabajado: sólido, realista y original.
Si en el anterior Centauro pudimos ver lanzacohetes y morteros, amén de los explosivos por control remoto de la edición Survivor, en esta también hicieron acto de presencia, pero acompañados de un chisme siniestro y mortífero denominado "Sentinel".
Éste era una especie de robot casi del tamaño de una persona, dotado de una ametralladora, y dirigido por control remoto por la unidad en cuyo poder cayera. Ese primitivo Terminator podía moverse en altura, girar sobre sí mismo y escupir una ingente cantidad de proyectiles sobre el objetivo mientras el operador podía disfrutar de la destrucción viéndolo todo en la pequeña pantalla de tv del mando, atento sentado tras un parapeto, fumándose un pitillo o saboreando una desfatigante.
Y cuando la cosa se ponía fea, cuando los elementos más hostigaban, cuando caían chuzos de punta, el viento se desataba y el frío hacía acto de presencia, cuando el enemigo desatado amenazaba con sobrepasar la unidad..., entonces aquello oído por primera vez en boca de los hombres de Black Bulls... aquel grito proferido a viva voz, surgido del pecho, ronco y atroz, ¡ESTO ES MILSIM, SEÑORES!
Y te sorprendías pronunciando lo mismo, y te reías abierta y francamente. Y aquello te reconfortaba y te empujaba aún más a tirar pa lante, a mantenerte vivo y centrarte en la misión, que en aquellos momentos era lo único que contaba.
Desde aquí mi más alta consideración por Eladio y escuadra C.O.A.S. al completo, que sin ellos esto no sería posible, y por representar la fuente de la que bebemos tantos amantes de la simulación militar por muchos denominada "extrema", en nuestro continuo apredizaje y discurrir.
Por escuadras G.I.A.P., Black Bulls, HeadShot y Vélites, con los que tuve el honor de compartir unidad. La experiencia fue muy gratificante. Me sentí como en casa.
Por todas aquellas escuadras, nacionales y rebeldes, que participaron con honor en este Centauro y los anteriores y, sobre todo, por los que participarán en esos futuros infiernos en la Tierra. Sin vosotros esto tampoco sería posible.
Y con todo esto, parafraseando con sumo respeto aquellos versos que sobre Don Alvaro de Bazán se escribieron, puedo concluir con lo que bien pudiera definir a cada uno de los hombres que integraron aquella unidad Charlie Rebelde los días 4 y 5 de noviembre del año 2017 en aquellas tierras por las que discurre un río llamado Bordón:
Alto Mando servido y unidad honrada,
dirán mejor quién he sido
por la cruz de mi apellido
y con la cruz de mi espada.